Blogia

Escuela laica y más...

Un buen argumentario sobre la clase de religión

 

Lo podemos encontrar en:

http://www.revistadefilosofia.com/8MORENO.pdf.

Ricardo Moreno Castillo es un profesor de matemáticas de secundaria que escribió el “Panfleto Antipedagógico” que, aparte de lo desafortunado del título, es un escrito que merece la pena leer con detalle.

Le hicieron una entrevista en “revistadefilosofia.com” sobre uno de los temas que trata su libro, el de la asignatura de religión y creo que da un punto de vista lúcido y brillante. A continuación dos perlas para que os inviten a picar en el enlace:

 

…Si el Estado sigue financiando a las religiones, a la postre esos profesores los estaríamos pagando todos. Pero supongamos que las que las iglesias se pudiesen mantener por sí mismas. Entonces la presencia de profesores de una u otra religión dependería de lo saneadas económicamente que estuvieran las correspondientes iglesias, lo cual sería un agravio comparativo amparado por el Estado. Y además, en esa competencia, la Iglesia Católica estaría pronto en inferioridad frente a la musulmana, que podría tener sus profesores de religión dentro de los institutos pagados por jeques árabes. Estoy seguro, segurísimo, que cuando el Islam sea un competidor importante para los católicos, los obispos sufrirán un ataque de amnesia (¡han tenido tantos a lo largo de la historia!) y reivindicarán el carácter estrictamente privado de la enseñanza de la religión…

 

…Ni la ética ni la historia de las religiones pueden ser alternativas a la religión. La primera, porque la ética es la reflexión racional de cómo podemos vivir mejor con nosotros mismos y con los demás, y no hay razón para excluir a los creyentes de esa reflexión, con el pretexto de que mientras los demás reflexionan ellos están ocupados recibiendo el adoctrinamiento en una fe. En cuanto a la historia de las religiones, por razones que apunté más arriba, es algo que todo el mundo debe saber, es una materia, a mi juicio, tan importante como las matemáticas, y a nadie se le ocurriría proponer las matemáticas como alternativa a la religión….

Julián

La enseñanza de la Religión en la ESO

Publicado el día 08.11.2006 en “El Heraldo de Aragón”: COLPISA. Madrid | El Ministerio de Educación y Ciencia y las Comunidades Autónomas acordaron en la Comisión General de Educación , las enseñanzas mínimas que habrán de impartirse en la etapa de Educación Secundaria Obligatoria (ESO), en el marco de lo dispuesto en la Ley Orgánica de Educación (LOE). A partir de la aprobación de este Real Decreto, las Comunidades Autónomas tendrán que completar los currículos con su propia regulación.
 (…)
 La enseñanza de la Religión: Sobre la enseñanza de la Religión, la propuesta de Real Decreto establece que quien no desee enseñanza de la Religión para sus hijos no deberá cursar ninguna asignatura alternativa, porque el derecho de unos padres no se tiene que convertir en obligación para otros. A estos alumnos los centros les ofrecerán la necesaria atención educativa. En cuanto a los padres que deseen que sus hijos cursen Religión, podrán elegir entre clase de Religión en su versión confesional (católica u otras religiones que tengan suscritos convenios con el Estado español) o no confesional (Historia y cultura de las religiones).

La enseñanza de las religiones se evaluará y sus calificaciones contarán para la promoción de curso. No obstante, con el fin de garantizar el principio de igualdad y la libre concurrencia entre todos los alumnos, las notas de religión no se tendrán en cuenta para el acceso a la educación postobligatoria o para obtener becas.

Con respecto a otras materias, es destacable el impulso que se da a las Matemáticas, que incrementan su horario hasta un mínimo de 385 horas en la etapa. Se refuerzan la Educación Plástica y Visual y la Música, que vuelven a requerir al menos 105 horas en los tres primeros cursos de ESO y también se regulan los contenidos de Educación para la ciudadanía y los derechos humanos, que se impartirá en 35 horas en uno de los tres primeros cursos de la ESO, y de Educación ético-cívica, que se impartirá en el cuarto curso. (…).”Salud y República.José A. Rovira

El Consejo Escolar pide que la Religión salga de la escuela

Antonio M. Yagüe – Madrid                

 

El Consejo Escolar del Estado, máximo órgano consultivo de representación de la comunidad educativa, aprobó ayer su informe anual sobre el curso 2004-2005 en el que considera que la enseñanza confesional de la religión "no ha de formar parte del currículo escolar" y cree "imprescindible" que tampoco exista "otra área de carácter no confesional como alternativa". El documento también pide que se revisen los acuerdos del Estado español con el Vaticano y otras confesiones religiosas.

El pleno respaldó una enmienda del sindicato STES que defiende que la enseñanza de la religión no ocupe tiempo dentro del horario escolar. Los representantes conservadores la consideraron "inaceptable" ya que, a su juicio, va en contra de los acuerdos con el Vaticano y de la ley orgánica de Educación (LOE).

ATENCIÓN EDUCATIVA

Con un punto de vista distinto al de la mayoría del Consejo Escolar del Estado, las organizaciones de centros de enseñanza apoyaron la propuesta del ministerio de incluir en la ESO una asignatura de religión no confesional como una de las alternativas, y pidieron que sean las autonomías, y no los centros, quienes definan los contenidos de la "debida atención educativa" que también se prevé como opción. "No puede consistir en recreo o marcharse a casa", defendió el presidente de FERE, Manuel de Castro. La presidenta de la CECE, Isabel Bazo, consideró que podría producirse un agravio comparativo en la carga lectiva entre los alumnos que cursen religión confesional, no confesional o ninguna de ellas.

 El Periódico de Cataluña, 3-11-06

Este es el texto exacto sobre la enseñanza de la religión y la alternativa en la ESO según el borrador de Decreto de Enseñanzas Mínimas para Secundaria
Disposición adicional segunda. Enseñanzas de religión

1. Las enseñanzas de religión se incluirán en la Educación secundaria obligatoria, de acuerdo con lo establecido en la disposición adicional segunda de la LeyOrgánica 2/2006, de 3 de mayo, de Educación.

2. Las administraciones educativas garantizarán que, al inicio de cada curso, los padres o tutores de los alumnos puedan manifestar su voluntad de que éstos reciban o no reciban enseñanzas de religión.

3. Los centros docentes dispondrán las medidas educativas para que los alumnos cuyos padres o tutores hayan manifestado su voluntad de no cursar enseñanzas de religión reciban la adecuada atención educativa, a fin de que la elección de una u otra opción no suponga discriminación alguna. Dichas medidas deberán ser incluidas en el respectivo proyecto educativo del centro para que padres y tutores las conozcan con anterioridad.

4. Los padres o tutores que manifiesten la voluntad de que sus hijos o tutelados reciban enseñanzas de religión podrán elegir entre las de religión católica, las de aquellas otras confesiones religiosas con las que el Estado tenga suscritos Acuerdos Internacionales o de Cooperación en materia educativa, en los términos recogidos en los mismos, o la enseñanza de historia y cultura de las religiones.

5. La evaluación de las enseñanzas de la religión católica y de historia y cultura de las religiones se realizará en los mismos términos y con los mismos efectos que las otras materias de la etapa. La evaluación de la enseñanza de las diferentes confesiones religiosas con las que el Estado haya suscrito Acuerdos de Cooperación se ajustará a lo establecido en los mismos.

6. La determinación del currículo de la enseñanza de religión católica y de las diferentes confesiones religiosas con las que el Estado ha suscrito Acuerdos de Cooperación será competencia, respectivamente, de la jerarquía eclesiástica y de las correspondientes autoridades religiosas.

7. Con el fin de garantizar el principio de igualdad y la libre concurrencia entre todos los alumnos, las calificaciones que se hubieran obtenido en la evaluación de las enseñanzas de religión no se computarán en las convocatorias en las que deban entrar en concurrencia los expedientes académicos ni en la obtención de la nota media a efectos de admisión de alumnos, cuando hubiera que acudir a ella para realizar una selección entre los solicitantes.

¿En qué se diferencia esto con la LOCE del PP?

¿Éste es el laicismo del PSOE? Qué vergüenza.

JART 

 

La CEAPA ve la mano de la Iglesia detrás de la nueva asignatura

A. M. Y. – Madrid

La asignatura laica de Religión, que el Ministerio de Educación ha incluido en el proyecto de enseñanzas mínimas para la ESO como alternativa a la católica o de otros credos, provocó ayer reacciones contrarias de los padres, profesores y dentro del propio PSOE. Esta nueva e inesperada opción, denominada historia y cultura de las religiones, será debatida el martes en el Consejo General de Educación con todas las comunidades autónomas.

Lola Abelló, presidenta de la Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos (CEAPA), entidad laica de centros públicos, aseguró que "se ve la mano de la Iglesia" detrás de la nueva propuesta. "Regular dos asignaturas optativas de Religión es la fórmula que perseguían en el anterior Gobierno del PP los que querían Religión para todos. Nos sentimos defraudados", denunció Abelló. La presidenta de CEAPA recordó que aunque aceptan los acuerdos con el Vaticano, exigen una aplicación mínima y rechazan la creación de una asignatura alternativa, que no les ha sido consultada y que denunciarán cuando sea estudiada en el Consejo Escolar.

LIBERTAD DE CONCIENCIA

Para la Plataforma por una Sociedad Laica, que agrupa a casi 50 organizaciones sociales, la libertad de conciencia estaría en peligro ante una nueva asignatura de Religión que, además, es evaluable. "Es inaceptable, porque estamos en el ámbito de las elecciones voluntarias y libres, cuya legitimidad corresponde a la libertad de conciencia del individuo", rebatió Victorino Mayoral, directivo de la plataforma y diputado del PSOE. La plataforma subrayó que la nueva asignatura llega al sistema educativo porque existe la materia de Religión católica y no porque al legislador le interese que los alumnos conozcan los distintos credos.

El portavoz del sindicato de profesores STES, Augusto Serrano, tachó la iniciativa una "grave irresponsabilidad", que va contra la propuesta del Consejo Escolar del Estado y contra lo dictaminado por el Tribunal Supremo, que prohibió una asignatura alternativa a la Religión. "Nuestro desacuerdo es total. Interpondremos un recurso", anunció Serrano. Sólo Luis Carbonel, presidente de la CONCAPA, que agrupa a los de centros católicos concertados, consideró la alternativa "un paso adelante del Ministerio de Educación".

El Periódico de Cataluña, 2-11-06

Más de lo mismo

Recogido del blog de FAPAR.

Parece ser que no avanzaremos en la vida con este tema....

 El MEC y los obispos se emplazan para nuevas reuniones para llegar a acuerdos 
 EFE / 28-09-06
El Ministerio de Educación y Ciencia (MEC) y la Conferencia Episcopal Española (CEE) se han emplazado a futuras reuniones para intentar llegar a acuerdos sobre la asignatura de Religión y la regulación del profesorado que la imparte.

 Así lo manifestaron hoy a Efe fuentes de ambas partes después de reunirse esta mañana durante algo más de una hora para tratar esas dos cuestiones. Las fuentes añadieron que no proporcionarán detalles del resultado de las conversaciones “por discreción” y explicaron que se han comprometido a no hacer declaraciones públicas al respecto. Esta reunión, a la que asistió la ministra de Educación y Ciencia, Mercedes Cabrera, es continuación de las dos anteriores mantenidas en torno al verano para tratar las disposiciones adicionales segunda y tercera de la Ley Orgánica de Educación (LOE), relativas a la asignatura de Religión y la regulación de su profesorado.

Por parte del Ministerio también asistieron el secretario general de Educación, Alejandro Tiana, y el subsecretario del MEC, Fernando Gurrea. En representación de la CEE acudieron el obispo de Málaga, Antonio Dorado, que es el presidente de la Comisión de Educación de la Conferencia Episcopal, y el cardenal y arzobispo de Toledo, Antonio Cañizares, vicepresidente de la Conferencia Episcopal. Asimismo asistió a la cita Juan Antonio Martínez Camino, secretario general y portavoz de la CEE, mientras que, como técnicos de la Conferencia Episcopal Española estuvieron Modesto Romero y Silverio Nieto. Fuentes de la CEE precisaron al término de esta reunión que “no será la última y habrá más”, pero que en principio no tenían previsto hacer declaraciones sobre el contenido de la misma. En julio se reunieron con carácter técnico el MEC y la CEE para tratar exclusivamente las condiciones laborales del profesorado de Religión, y las partes consideraron que con el encuentro se había dado un paso importante aunque sin alcanzarse ningún acuerdo.

CEAPA denuncia presiones de los obispos para imponer una alternativa a la clase de religión

En su revista de mayo-junio, la Confederacion Española de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos (CEAPA) incluye un artículo en el que explica que, a causa de las reuniones que periodicamente mantienen el Ministerio de Educación y la Conferencia Episcopal, máximo órgano ejecutivo de la Iglesia Católica en España, los obispos están presionando al Gobierno para establecer una asignatura de religión bis para aquellos alumnos y alumnas no matriculados en religión.

Leer artículo completo en:

http://www.ceapa.es/files/notasprensa/File00109.pdf

 

Reflexiones de ANDALUCÍA LAICA acerca de la religión en la escuela

En http://www.laicismo.org/p_documento.php?id=578

Las aportaciones de ANDALUCÍA LAICA al documento de la Consejería de Educación “Propuesta para el debate de una Ley de Educación para Andalucía” recogen de manera clara y detallada su opinión acerca de cómo debe garantizar dicha Consejería que la escuela pública sea laica.

 

EL CONCORDATO Y LA LEY DEL EMBUDO

Por Julián

Un editorial de El Periódico de Aragón (12/06/2006) titulaba "Aquí nada ´concuerda´ " refiriéndose al "Concordato", cocinado en la dictadura y firmado por el Vaticano y el Estado Español en los albores de nuestra democracia.

Este Concordato preconstitucional se alza como un muro de piedra infranqueable cuando se trata de mejorar la enseñanza pública erradicando de una vez y para siempre la asignatura de religión. Dicen los sectarios versados en leyes que este Concordato es intocable, que es una referencia legal de superior rango a cualquiera otra planteable. Que lo que diga este tratado internacional "va a misa". Para mi que este tratado nació inconstitucional y cada vez se evidencia más.

Pero bueno, los laicistas nos creemos que las leyes son para cumplirlas mientras se lucha por cambiarlas y mejorarlas. Nos aguantamos con el Concordato y a pagarles a los confesionales sus clases de religión mientras nuestros hijos se aburren haciendo nada por que no pueden avanzar en su currículo. Hacer eso sería trampa.

Hoy me entero de que los que hacen trampa son ellos. Surge un litigio entre comunidades católicas con el que nos lleva aburriendo la prensa desde hace meses. Un conjunto de piezas de arte sacro, que su valor avergüenza a cualquier ONG que de verdad trabaja con pobres, son las responsables del debate. Pues bueno está claro que el propietario de los bienes es la entidad transnacional “Iglesia Católica”. Sus jerarquías han dejado claro que desean dejarlos de la frontera catalana pa’ca, pero resulta que los curas y demás gentes catalanas prefieren, no son tontos, que sigan de la frontera pa’lla. Dará lo mismo porque los millones que valen esas piezas seguirán sirviendo para la ostentación eclesial y para nada financiarán ningún proyecto más o menos social.

Según dice la prensa, ese famoso Concordato tiene la clave para la solución. Tan fácil como cumplirlo y los bienes llegarían a su ubicación geográfica aragonesa. Pero ahora parece que no es tan urgente cumplirlo para unos y para otros, tan solo es interesante para los de aquí y, como siembre nos toca la parte estrecha del embudo.

A mi se me ocurre una solución más imaginativa. Que los vendan. La Iglesia Católica manifiesta insistentemente no tener suficiente financiación. Aun sin pagar IVA y otros impuestos siempre hacían corto con lo que el Estado recaudaba en el IRPF para ellos y, gobiernos de derechas e izquierdas, rellenaban su hucha a espaldas de los españoles para pagar sus facturas. Pega poco con los votos de pobreza, con la austeridad emblemática del clero, contar con semejantes patrimonios. Vendan las joyas de la familia y pongan a circular su dinero verán como medran económicamente.

De hecho, volviendo al dichoso “Concordato”, había unos plazos para cumplir para una financiación autónoma a base de aportaciones de los fieles y supongo que alguna que otra tómbola o cambalache financiero tipo Gescartera. Pues bueno, la parte ancha del embudo manda que el Concordato se incumpla con flexibilidad. Se eterniza la espera para que los católicos se paguen sus propias creencias.

La parte estrecha nos vuelve a tocar a los laicistas. Aquí si que se cumple el Concordato hasta la letra pequeña. Asignatura de religión hasta en la sopa. Nos invitan a pagar a escote sus profesores de religión elegidos por el “ordinario del lugar” que tienen el carácter de claustrales con la misma voz y voto que los que pasaron una oposición. Pueden representar a los otros profesores en el consejo escolar. Pueden conformar e incluso dirigir un equipo de ciclo que propondrá el desarrollo del currículo escolar a la comisión educativa del centro o a su director. Aunque en ese ciclo estudie mi hijo para el que mi conciencia tiene reservada una educación aconfesional.

La escuela pública tendrá cada mes 20 horas más de clase… “pero solo en Cataluña”

Por Julián

 

Para septiembre del 2006, cuando empiece el próximo curso escolar, la Conselleria d'Educació de la Generalitat Catalana proyecta que los alumnos de las escuelas públicas de primaria catalanas amplíen su horario de cinco a seis horas diarias, equiparándolo así al de las escuelas privadas. Los presupuestos de la Generalitat ya incluyen las partidas para contratar a los 2.000 maestros necesarios para ampliar el horario sin modificar la jornada laboral, y para empezar a financiar esa sexta hora en las concertadas….

 

Esto se podía leer en la página web de www.fapar.org. Parece ser que es viable la idea de la sexta hora cuando la administración tiene voluntad de invertir dinero en educación

 

 

La escuela de un Estado aconfesional

Por Begoña

 

Vivimos en un estado aconfesional. Eso dice la Constitución española. Eso significa que vivimos en un estado en el que se garantiza el derecho a profesar la religión que cada cual considere y el derecho a no tener ninguna religión. 

Hasta aquí todo correcto. Coherente con el respeto a la diversidad de credo y pensamiento en una sociedad moderna, desarrollada, democrática y plural. Coherente también con el derecho de padres y madres a educar a sus hijos e hijas bajo los preceptos de la religión que practican, si es el caso, o en la ausencia de creencias religiosas si ese es su caso. 

Claro que en el caso de estos niños y niñas ya no están tan claros sus derechos. Están obligados por ley a ir a la escuela desde los tres años, para desarrollar competencias, destrezas y habilidades que les permitan convivir e integrarse adecuadamente en la sociedad en la que viven. Esto responde, coherentemente, a su derecho a recibir una educación integral y al deber del Estado de proporcionársela.  

Sin embargo, en un exceso por parte de la administración del Estado en el ejercicio de sus deberes, estos niños y niñas se ven obligados a elegir desde los tres años entre aprender una doctrina religiosa o asistir a una asignatura que tan sólo se plantea como alternativa a esa doctrina. 

En una sociedad plural y multicultural como la actual, la Administración del Estado se está esmerando en intentar que la oferta de clases de religión no sea discriminatoria entre creyentes (no así respecto a quienes no lo son) y responda a casi todo tipo de religiones. Claro que en la realidad, este ofrecimiento se basa en una única obligación contraída cuando España era un estado confesional católico y falto de derechos y libertades. Una obligación que después de tres décadas de democracia todavía no se han atrevido a eliminar.  

Y mientras tanto, en las escuelas el alumnado se clasifica en función de las creencias de sus familias. Dos horas a la semana, en el horario lectivo, se parte la clase, como mínimo, en dos. A veces tienen suerte y los dos grupos tienen un número parecido, por lo que para las criaturas no supone un sufrimiento este reparto. En otros casos la situación es más peliaguda y son un número minoritario quienes salen del aula para cursar “alternativa”. Es difícil que comprendan por qué son marginados de su aula, señalados como diferentes sin sentirlo, obligados a pasar ese tiempo dibujando, leyendo o estudiando, y requiere un gran esfuerzo de sus padres explicarles la razón y que la acepten como un hecho natural sin consecuencias. 

Claro que es un hecho que siempre tiene consecuencias. La llamada alternativa de la religión es una asignatura sin contenidos posibles, que requiere grandes dosis de imaginación en el profesorado que la imparte y la asunción de un cierto riesgo para soslayar la ley. Porque resulta que en esta llamada asignatura no se pueden incluir contenidos reales. No pueden dar nada que sea curricular y, ¿qué no lo es hoy en día? Si la escuela tiene como objetivo promover el desarrollo integral de su alumnado, todo lo que lo favorezca es curricular. ¿Qué les queda, pues, a los sufridores de la alternativa? O tienen suerte y sus profes se la juegan, haciendo actividades para el desarrollo de la inteligencia emocional por ejemplo, o pueden cruzarse de brazos ¡dos horas a la semana! 

Y todo esto ocurre porque, se supone, se están respetando los derechos de todos. ¿De quienes? Fundamentalmente de aquellos católicos que consideran su religión como la garante de la moralidad y los valores sociales, sus valores, que consideran universales. Desde esa consideración se creen en el derecho de que a sus hijos los adoctrine la escuela. Quizás porque es más cómodo que llevarles por la tarde o los fines de semana a la parroquia. Y desde esa consideración son incapaces de entender que hay otras personas, creyentes o no, que ven más coherente mantener la formación religiosa –o su ausencia- en el ámbito privado de su casa o en el del centro al que acuden para orar. Que respetan los derechos de todo el mundo sin intentar que prevalezca el suyo por encima. Que comprenden que no pueden discriminar a un grupo de niños y niñas en su propia escuela por el hecho de que sus padres y madres no quieran que reciban adoctrinamiento cristiano en el aula.  

Claro que mientras la Administración del Estado no se atreva a asumir su responsabilidad y siga bajo el poder de la iglesia católica en este campo, poco o nada podremos hacer. Sólo elevar nuestra voz cargada de razones, con la esperanza de que cada vez sean más las voces serenas, razonables y respetuosas las que pidan que España ejerza de lo que presume en su Constitución, de Estado aconfesional que promueve la libertad de todas las creencias en igualdad.  Y eso sólo será posible el día que sus escuelas sean aconfesionales, respetando todas las creencias en igualdad. 

Ese día no habrá clases de ninguna religión ni alternativa en el horario lectivo de nuestras escuelas. Quizás haya alguna en horario extraescolar, como una actividad más ofrecida en los colegios públicos, haciendo uso de unos espacios que son de todos, pero en un horario voluntario compatible con clases de yoga, fútbol o rock and roll. ¿Llegará ese día? ¿O viviremos una vulneración de derechos “hasta la eternidad”?

 

De una hora menos a la hora sexta

Por Julián

Disculpen, pero yo protesto. Va a acabar el curso y me doy cuenta que les han robado a mis hijos una hora de docencia cada semana. No es cierto que reciban 25 horas de clase a la semana. Eso es mentira y nos engañan, hay solo 24 que incluyen los recreos (2,5 horas). Los que ejercen su supuesto derecho de recibir doctrina religiosa, gratuita pagada entre todos, creyentes y no creyentes, pueden pensar que reciben las 25 horas que la ley dispone. A los que el sistema educativo discrimina por razones de conciencia con toda seguridad les hurta casi un 5 % de educación. Y no estoy dispuesto a renunciar a él para mis hijos, por que mis hijos lo necesitan y a mi no me van a perdonar ni el 1 % de los impuestos.

La respuesta no está en una clase alternativa sobre valores universales. La solidaridad, el amor, la igualdad, ... Muy bonito pero basta de engañar diciendo que eso forma parte así del currículo escolar. La educación en valores es imprescindible pero impartida transversalmente, como la propia ley plantea. Y además para todo el alumnado del centro, no solo para los “raros” que sus padres les evitan el ir a religión. Por no ser católico no se hace necesario un plus de valores para que los niños sean buenos. Resulta casi insultante. Los valores que se imparten en el sistema educativo son suficientes y son los correctos y, en todo caso, entrarán en contradicción con los valores de determinadas religiones. Ni en el catolicismo ni en el islamismo son iguales en derechos hombres y mujeres. La religión en demasiados ocasiones esta reñida con la ciencia, cada religión tiene su propia versión de la creación a la que no renuncian aún cuando los restos fósiles indican que sus postulados son imposibles. Según la religión católica los dinosaurios existieron antes de que dios creara el mundo. Los anticonceptivos y la planificación familiar que el estado promociona con costosas campañas pagadas por todos, las contrarresta con la asignatura de religión que también es pagada por todos. Las asignaturas de religión y sus valores entran en contradicción con los valores que se imparten transversalmente en el sistema educativo.

Con esto último me atrevo a decir que ni siquiera los que optan por religión reciben las 25 horas de docencia. La asignatura de religión es en mucho casos contraformación.

Estamos en la cola de Europa en cuanto a calidad de enseñanza y nos permitimos el lujo de renunciar a una parte del tiempo docente, es de locos. Supongo que los factores estratégicos, las corrientes pedagógicas, si la educación está planteada para acceder al mercado laboral o se apuesta por las asignaturas más instrumentales. Todo esto condiciona la calidad de la enseñanza, como conjugar esos aspectos cualitativos es discutible. Lo que es incontestable es que ampliar el horario lectivo contribuirá a mejorar los resultados académicos. En el sistema educativo el “como” es importante pero el “cuanto” es básico. La mejor metodología puede fracasas si carece de recursos. Dotemos a nuestra escuela pública de infraestructura, equipamiento, profesores y tiempo para que se produzca el ejercicio de la educación.

En irrenunciable la sexta hora diaria. No solo que las 25 horas lectivas lo sean de verdad. La primera inversión del Estado en educación debería pasar por ampliar tiempo y por lo tanto profesorado.

Raul P.Oeta

Por Julián

Raul Pablo tenía 2 años y faltaba poco para su cumpleaños, ya sabía lo que se iba a pedir. Quería una cartera por que ya iba a empezar el colegio. Raul manejaba un poco justo el lenguaje porque era muy pequeño, era el menor de la clase que hoy iba a comenzar, era su primer día de colegio.


Su mama le hizo una foto con el babi y la cartera y salieron de casa para el cole.
Lo peor fue dejar a su mama en la puerta y entrar el aquella casa extraña, pero enseguida se encontró en una aula bien iluminada, muy bonita y con un montón de niños como él. Vino un señor, el maestro, se sentaron al rededor de él, "en asamblea" y dijeron sus nombres. Era muy divertido aunque era el primer día y tenía un poco de miedo.


Tras pasar un rato con juegos y canciones entraron dos señoras en el aula que saludaron al maestro, este se despidió de los niños hasta luego y, de repente, la señora más mayor me llamó por mi nombre y mi apellido. Todos los niños se volvieron hacia mi. Yo no quería contestar, tenía miedo. La señora mayor se acercó y me dijo que la tenía que acompañar, que mis compañeros iban a recibir clase de religión. A mis dos años yo no sabía que era eso de religión por lo que esa explicación me desconcertó aún más. Por el pasillo me llevaba de la mano y yo no sabía donde. Entonces me explico que mis papas habían decidido que yo no recibiera clase de religión católica y que iba a pasar una hora en su despacho. Eso sería así una vez a la semana durante todo el curso.


La señora era la directora del centro, compartiría su despacho particular durante la clase de religión, no podía dedicar un maestro para un único niño al que sus padres le evitaban la clase de religión, posiblemente por capricho.

De todas formas, todas estas explicaciones eran inimaginables para él. Solo percibía que por que sus padres lo habían dicho iba a pasar un buen rato solo y aburrido. La señora le había dado unas pinturas y un papel pero no tenía ganas de dibujar, seguía teniendo un poco de miedo. Entonces la señora recibió una llamada y tuvo que salir. Dijo que no se moviera del despacho.


Cuando quedó solo fue cuando comenzó de verdad el miedo, descubrió que esa señora tenía colgado de la pared de ese cuarto un muñeco. Era un señor que estaba retorcido de dolor y lleno de sangre, fue su primera imagen de la tortura. Estaba lleno de heridas y para sujetarlo a unos palos, le habían roto las manos y los pies con unos clavos. Se puse a llorar y a gritar y al poco regreso la señora con otros señores. No podía parar de llorar. Preguntaron por que se había puesto así y solo pudo señalar con el dedo aquel muñeco de la pared. Entonces la señora le dijo que a "El" lo habían puesto así por todos nosotros. Entonces fue cuando salió corriendo del despacho llamando a sus padres a gritos.


Después de aquello les reprocharon a sus padres que su hijo no supiera lo que era un crucifijo y dijeron que la directora del centro podía tener en su despacho los objetos personales que quisiera.

"el derecho de unos no puede suponer una obligación para otros"

Eva Almunia, abril de 2005

 

Esto decía la secretaria de Educación del PSOE durante la presentación de lo que iba a ser la nueva Ley de Educación Secundaria Obligatoria, para acabar proponiendo que la religión no tuviera asignatura alternativa.

La entonces ministra María Jesús San Segundo afirmó que esta asignatura sería “evaluable, pero no computable”
"Los padres que quieren que sus hijos estudien religión ya tienen ese derecho garantizado, pero ahora hay que garantizar el de aquellos que no eligen esta opción".

LA ASIGNATURA ALTERNATIVA A LA DE RELIGIÓN

Por Julián

El titulo que antecede es la mejor y probablemente la única definición posible del concepto del que deseo hablar, y eso que es evidente que no define nada. Al contrario que otras asignaturas, esta, en su denominación no hace mención a su contenido.


Curiosamente todo el mundo debería saber que contiene, ya que normalmente, cuando un padre de un niño de tres años va a matricularlo en un centro público, si no manifiesta otra cosa es la asignatura que recibiría antes que la de cualquier religión. A nadie se le puede preguntar que opción religiosa quiere para sus hijos y si no solicita nada determinado su opción es la mencionada “asignatura alternativa a la religión”.


Claro que lo que ocurre no es esto, normalmente, aunque el formulario oficial evite preguntar directamente por una opción religiosa, el día de la matricula el padre se ve interpelado por numerosas cuestiones prácticas sobre si lo apunta a religión (católica claro) o a alternativa.


Hay muchas maneras de relacionarse con la religión, todas forman parte de la intimidad de las personas pero ese día, si aun no eran conocidas, saltan al ámbito público aunque hubieras intentado vivir tus creencias privadamente. Seguro que a muchas personas esto no les supone ningún problema, pero existe seguro un grupo de personas que esto no les hace ninguna gracia ya que tenían entendido que en este país no había que manifestar las opciones religiosas o de conciencia.


Frente a esta pregunta hay tres posturas, dos claras y una difusa. Estarán los que optan por religión, conocen la asignatura y la consideran lo mejor para su hijo. También estarán los que actúan por reacción y también lo tienen claro. Esto es, mi religión no es de las de obligatoria oferta por el sistema educativo o yo no tengo ninguna religión. Estos dos grupos en principio no tienen problema el día de la matrícula.


Pero hay padres que el día de la matricula tienen dudas. Puede haber muy variadas fuentes de duda, por ejemplo, provienen de una comunidad religiosa y, aunque ellos vayan a los servicios religiosos por inercia y costumbre, no quieren esta actitud acomodaticia para sus hijos, o les parece mal a lo mejor que ya a los tres años les inculquen una moral que no es exactamente la suya o que les hablen de dogmas y de temas espirituales que es demasiado pronto para que puedan entenderlos con un mínimo espíritu crítico, o cualquiera tiene derecho para dudar con sus propias razones. Dudan con la opción religiosa y entonces se plantean la otra opción,” la alternativa”.


Y ¿qué es la “alternativa”? pues quien suscribe este escrito aún no lo sabe muy bien respecto de sus contenidos. Si que tengo una idea sobre el origen de su existencia. Antes, cuando la asignatura de religión era de obligatorio estudio no había “alternativa”. Cuando asignatura de religión se volvió voluntaria para los estudiantes, se inventó la asignatura alternativa a la de religión. Hemos empezado a alcanzar la naturaleza de esta asignatura. Es cualquier cosa que hagan los estudiantes que no cursan religión mientras se imparte esta para los que si han optado por ella. Lógicamente en el contexto de un centro de enseñanza ese “ ... cualquier cosa que hagan los estudiantes ... “ se refiere al ámbito académico. Pero cabe resaltar que la creación de esta asignatura no responde a una necesidad específica para la formación de nuestros hijos, no es ningún complemento curricular, no complementa ninguna carencia educativa que tengan los estudiantes que por si mismos o por sus padres no han optado por estudiar alguna religión de las de oferta obligatoria. Al diferenciarse por algo tan particular del resto de asignaturas me atrevo a calificarla como una anomalía. Todas las asignaturas contribuyen a formar integralmente a ciudadanos, cada una es un componente equilibrado de los conocimientos que ayudarán a crecer a nuestros hijos y cada una tiene una duración proporcional a su importancia y dificultad, todas menos una. La “alternativa” tiene un espacio en el calendario escolar igual que la necesidad de formación religiosa que tienen los que optaron por la versión confesional del sistema educativo.


El derecho que tienen los estudiantes a que les den una formación religiosa en el sistema educativo público hace que otros estudiantes se vean forzados a sufrir esta anomalía.
Esta situación es anómala no solo por que se salga de lo normal sino que también lo es por su carácter perjudicial para los estudiantes. Es perjudicial por que durante el desarrollo de esta clase están condenados a no poder avanzar en sus estudios, en contraste con ser esta la razón principal por la que se encuentran en un centro de enseñanza.


Volviendo al punto anterior en el que un padre se encontraba con dudas en el momento de la matriculación. Recordamos que se estaba planteando la posibilidad de optar por "la alternativa", es difícil que su elección sea "la anomalía" de la que poco conoce y lo que conoce es negativo.


Este estado de la cuestión me hace pensar que en realidad una parte de los padres que optan por la educación confesional, no desean que adoctrinen a sus hijos. Más bien es que carecen de alternativa.

Qué es la campaña

JO NO T'ESPERE

El mes de julio se celebra en Valencia el Encuentro Mundial de la Familia.

Esta convocatoria de la Iglesia católica implicará la visita del Papa a nuestra ciudad. Las administraciones valencianas están apoyando de manera entusiasta la organización del acontecimiento y en los medios de comunicación podemos comprobar, casi diariamente, ese apoyo.

Por otro lado las posiciones oficiales de la Iglesia católica en cuestiones como el avance de los derechos de lesbianas, gays, transexuales y bisexuales; la igualdad plena para las mujeres y el respeto a sus decisiones; la violencia de género; el uso de métodos anticonceptivos; la interrupción voluntaria del embarazo; la prevención del VIH-SIDA y otras infecciones de transmisión sexual; la investigación científica con células madre; la reproducción asistida; el debate sobre el derecho a una muerte digna; la imposición de la religión en la escuela... son como mínimo discutibles y absolutamente cuestionables cuando su objetivo es imponer sus posiciones al conjunto de la sociedad, sean los ciudadanos católicos o no, normalmente por la vía de la prohibición.

Desde una posición laica, que respeta cualquiera ideología o principios morales pero donde no podemos aceptar que se trate de imponer los propios a nadie, queremos lanzar una iniciativa para hacer visibles otras opciones en todos los temas antes mencionados y, especialmente, como nexo común, reivindicar la libertad personal y la racionalidad frente a los modelos excluyentes y los fundamentalismos. Al fin y al cabo los modelos alternativos son, hoy por hoy, tan importantes cuantitativamente y cualitativa, como los que propugna el Vaticano.

En este momento la información en los medios y el amplio apoyo institucional está consolidando un único mensaje, un único discurso, el del Vaticano, al que podemos, al que debemos responder por responsabilidad ciudadana. Siempre con respeto, siempre con rigor, pero de manera decidida y con vocación de ser mayoritaria, de conseguir el máximo apoyo social posible.

Por todo esto un conjunto de organizaciones y entidades que desde su ámbito (educativo, de mujeres, de jóvenes, de lucha contra la sida, de gays, lesbianas, transexuales y bisexuales, de afectados por el alzheimer, diabéticos...) se puedan ver afectados por las declaraciones y posiciones de la Iglesia católica ponemos marcha esta campaña.


ANTE LA VISITA DEL PAPA
NOSOTROS/AS NO TE ESPERAMOS

Los días 8 y 9 de julio el Papa vendrá a Valencia a clausurar el Quinto Encuentro Mundial de las Familias. La doble condición que ostenta –cabeza de Estado del Vaticano y cabeza de la Iglesia católica- hace que esta visita no deje indiferentes a los ciudadanos y ciudadanas, tanto si estos son católicos como si no profesan ninguna religión, sobretodo porque las posturas públicas de la Iglesia inciden en las valoraciones de los derechos y deberes de la ciudadanía.

Por otro lado la implicación, el apoyo incondicional que están prestando las diferentes administraciones de la ciudad, la Diputación, la Generalitat y el Estado está mucho más allá de lo que es tolerable en un Estado aconfesional. No es aceptable que las instituciones públicas estén destinando un volumen ingente de recursos humanos, económicos, infraestructuras... a unos actos que no dejan de ser una propuesta de una organización, la Iglesia católica, que ni nos representa a todos ni es parte del interés común que debe guiar la actuación de los poderes públicos. Y todo eso en un acto que impone un modelo excluyente de familia.

Los grupos, colectivos y organizaciones que suscriben este documento, plurales y distintos en su orientación política, composición ideológica, confesional o no, manifestamos:



1/ Estado laico y sociedad laica

No vivimos en una sociedad con una única cultura o una única religión. Esta realidad es un rasgo insoslayable del momento histórico y social, pero es también una oportunidad para enriquecer nuestra visión y vivir la solidaridad con “el otro”. Todos y todas tenemos derecho a ser y celebrar lo que somos: ateos, agnósticos, religiosos, creyentes... y armonizar mediante el diálogo y las prácticas concretas – defensa de los derechos humanos, sociales, ecológicos y una sociedad más justa- nuestras creencias con las de los otros y con la sociedad. Para que la convivencia sea posible y positiva para todos y todas, es necesario, como condición insoslayable, que el Estado sea laico, y haga posible en una sociedad laica, el ejercicio de los derechos inherentes a todo colectivo.

Alertamos consecuentemente a ciertos sectores de la Iglesia católica para que eduquen su arrogancia confesional y asuman que el futuro pasa por la laicidad del Estado y de la sociedad con todas las consecuencias de respeto y de igualdad, sin ningún privilegio para una determinada religión. El Gobierno, por otro lado, debe ser consecuente con la aconfesionalidad que consagra la Constitución, legislar según criterios de laicidad y fomentar el respecto a la diversidad.


2/ Víctimas del neoliberalismo

El sistema neoliberal se desarrolla y se extiende a costa de crear exclusión y marginación en personas, pueblos y regiones. Reivindicamos la opción moral y ética a favor de los desfavorecidos y denunciamos el apoyo legitimador al sistema neoliberal que practican las confesiones religiosas. La connivencia que año tras año exhiben las autoridades católicas con los representantes del poder político y militar, como a la procesión del Corpus de Valencia, es una imagen plástica de esta perversión.

Instamos, pues, al conjunto de la sociedad y, especialmente a todas las iglesias y tradiciones religiosas a trabajar por un planeta limpio, habitable y sostenible; a fomentar unas relaciones entre los pueblos y personas basadas en la solidaridad, la cooperación y el respeto mutuo; a comprometerse en la cultura de la paz, de la no-violencia activa y del diálogo como herramientas eficaces en la resolución de conflictos, y a optar decididamente por la desmilitarización de los estados y naciones como garantía de una paz justa en un horizonte posible. Todas y todos, incluidas las iglesias y religiones, se acreditarán hacia las generaciones futuras en la medida en la que les legamos la cultura de la paz y de la vida.


3/ Acuerdos Iglesia-Estado

En el origen de muchas situaciones de privilegio de la Iglesia católica y del conflicto con el Estado español están los acuerdos firmados entre la Iglesia y el Estado el 3 de enero de 1979. Estos acuerdos generan desigualdad de la Iglesia católica con las otras confesiones religiosas, condicionan la libertad de las dos instituciones firmantes y difícilmente algunos aspectos de estos acuerdos pasaría la prueba de su constitucionalidad. Propugnamos, pues, su denuncia y derogación.


4/ Estado del Vaticano

La existencia y reconocimiento internacional de este teocrático, minúsculo, artificial y anacrónico estado, la cabeza del cual es el Papa, es un privilegio y un atributo de poder que daña la representatividad de la organización internacional de las naciones. Recordamos que el Vaticano no ha firmado la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Abogamos, pues, por la supresión y no reconocimiento de este estado.


5/ Sistema educativo y religión

Propugnamos un sistema educativo público, laico, democrático, de calidad y valenciano. Y eso no es compatible con la imposición de la enseñanza de la religión que defiende la jerarquía de la Iglesia católica, su influencia en la configuración y gestión del sistema educativo con criterios discriminatorios por razón de sexo, nivel socioeconómico..., su monopolio de la transmisión de valores de convivencia y cualquiera otro.

El reto de la cohesión social que nos depara la juventud y la multiculturalitat exige el esfuerzo público por crear condiciones de igualdad de oportunidades para poder ejercer la libertad en el futuro.


6/ Cultura y valenciano

La tendencia a la censura del libre pensamiento, de la expresión artística o científica... en definitiva, de la cultura es una constantación que perdura a lo largo de los siglos en la historia de la Iglesia católica. No es extraño encontrarnos en nuestros días con prohibiciones o coacciones de las administraciones públicas instigadas desde la jerarquía religiosa sobre obras de teatro, festivales musicales, exposiciones... Reclamamos la plena independencia de la sociedad y las instituciones pública frente a las maniobras censoras.

Por otro lado desde el infausto arzobispo Mayoral, hace casi 300 años, la Iglesia ha practicado la limpieza lingüística del valenciano. Ramon Llull, Ausiàs March, Joanot Martorell, Sor Isabel de Villena, Francesc Eiximenis, entre muchos otros, dan fe de la contribución literaria que hemos legado a la humanidad. Igualmente la Iglesia se ha caracterizado, especialmente el sector dirigente, por unirse a los sectores poderosos que han eliminado los rasgos culturales de nuestro pueblo y expulsado de su práctica la lengua de los valencianos y valencianas. Denunciamos enérgicamente como un atentado a la inculturación y a los derechos humanos la imposición forzada del castellano que ha sufrido la Iglesia del País Valenciano, así como su influencia decisiva en la castellanización de la sociedad, y reclamamos la reparación de este derecho conculcado.


7/ Ostentación y miseria

La madurez ética de una sociedad se manifiesta por la forma de tratar a los que ocupan los últimos lugares en lo escala social y por la preferencia de objetivos en la distribución del presupuesto público.

En una sociedad democrática son las ciudadanas y los ciudadanos los que evalúan los acontecimientos públicos y tienen la última palabra. En primer lugar, ante la visita del Papa exigimos contención en los gastos públicos, sencillez y sobriedad, y transparencia financiera: de donde vienen los recursos económicos, quien los aporta y en cuanta cantidad, en qué se esmercen, etc. No hay que olvidar que a unos cientos de metros de distancia de donde se monta un tablado que cuesta más de 130 millones de pesetas, malviven inmigrantes bajo el puente porque la administración valenciana no dispone de ningún albergue.


8/ Diversidad familiar

Desde hace décadas asistimos a una importante transformación de las estructuras familiares en nuestra sociedad. Existen familias tradicionales, extensas o nucleares, monoparentales, reconstituidas, homoparentales, con hijos o sin, parejas de hecho... La liberación de la mujer, el reconocimiento de la dignidad de gays, lesbianas, transexuales y bisexuales, y sus traducciones legales en matrimonio, uniones de hecho, divorcio, filiación... son parte de esta evolución que encuentra la oposición intransigente de los sectores más reaccionarios de la sociedad que se oponen a cualquiera cambio que suponga perder el poder simbólico y real que ejercen sobre la sociedad en esta materia.

Los gays, las lesbianas, los y las bisexuales y transexuales y también las madres solteras, las personas divorciadas... han sido colectivos estigmatizados, perseguidos, incluso, han sido quemados y condenados a muerte a lo largo de la historia. La Iglesia católica también tiene en este asunto las manos manchadas de sangre y de ignominia. Contrariamente a lo que cabría esperar para reparar sus fechorías históricas, cuando el Gobierno español agiliza el derecho al divorcio o amplía el derecho del matrimonio civil, la jerarquía católica se opone con vehemencia contumaz, de tal forma que sale a la calle a manifestar el rechazo al amor entre personas del mismo sexo, cosa que no hizo en la guerra de Irak y tantas otras reivindicaciones sociales.

Recordamos al Papa y a la jerarquía católica que la competencia para legislar sobre las familias, el matrimonio o el divorcio es del Gobierno, y no de la Iglesia. Esta sólo tiene atribuciones sobre su sacramento, no sobre la legislación civil del matrimonio. Olvidar este hecho es pretender retornar al nacionalcatolicismo de infausta memoria, y es que la Iglesia Católica tuvo con su actuación en el alzamiento militar del 36 y durante el franquismo mucha responsabilidad colaborando en un genocidio, siendo parte activa, sin haber pedido disculpas ni reconocer errores.


9/ Las mujeres

Las iglesias, unas más que otras, son instituciones fuertemente marcadas por el patriarcalismo y por el machismo, y a lo largo de la historia han producido una teología misógina que ha considerado a las mujeres como prácticamente inductoras de todos los males, sobretodo de los que hacen referencia al sexo. Por otra parte, difícilmente podría haber sido de otra forma, si tenemos en cuenta que la producción teológica y la dirección de las iglesias han estado en las manos de teólogos y eclesiásticos célibes. Aún así, las mujeres a través de una tenaz y constante lucha van adquiriendo situaciones de igualdad en la sociedad civil. Contrariamente a esta tendencia emancipatoria, la jerarquía católica asume una retórica que loa las excelencias de las mujeres, pero en la práctica no les permite elegir libremente e, incluso, justifica los maltratos a las mujeres. Denunciamos por lo tanto esta práctica adulteradora y misógina, y exigimos la plena igualdad para la mujer. Hay que acabar con cualquier discurso o práctica discriminatoria hacia a las mujeres.


10/ Derechos reproductivos y salud sexual

El uso de los anticonceptivos en la vida sexual de las personas es el recurso que más ha humanizado las relaciones sexuales y las ha dotado de responsabilidad en las decisiones reproductivas. La maternidad y la paternidad responsables son posibles gracias a los anticonceptivos, la reproducción asistida, a la implantación de óvulos fecundados.... Nos oponemos, por lo tanto, a la doctrina de la Iglesia que los condena, y le pedimos, en tanto está influyendo en las políticas de los Estados y las decisiones de las personas, qué, con criterios multidisciplinares, revise su tradicional postura sobre todo aquello que hace referencia al sexo en general.

Los derechos reproductivos están reconocidos internacionalmente como parte de los derechos humanos e incluyen que tanto las mujeres como los hombres tengan el control de su sexualidad, y de los métodos anticonceptivos en particular, y puedan decidir si quieren tener hijos, cuando y cómo. También implican un reconocimiento de las diversas opciones sexuales para vivir una sexualidad feliz, libre y con salud. Reivindicamos que se garantitcen estos derechos para la autonomía de las mujeres.


11/ Preservativos, SIDA y estigma social

Los preservativos son el medio más adecuado para tener unas relaciones sexuales más seguras, y es el recurso que la OMS propugna por frenar la pandemia del SIDA. Consideramos que la jerarquía de la Iglesia se hace cómplice de esta pandemia con la increíble condena que hace de esta medida de prevención sexual, necesaria para poder tener unas relaciones sexuales responsables y saludables.

Es indispensable la desestigmatización que erradique los mensajes punitivos difundidos desde los púlpitos y que contribuyeron a crear la imagen del SIDA como a "castigo de Dios". Somos conscientes que el estigma del VIH-SIDA se relaciona con la carencia de medicamentos antirretrovirales, por lo tanto es necesaria la movilización para proporcionar tratamientos a todas las personas que viven con el VIH, contribuyendo de esta manera a eliminar el sufrimiento provocado por el estigma de la SIDA.


12/ Bioética

Actualmente los seres humanos tenemos la inmensa suerte de conocer científicamente muchas cuestiones que forman parte del proceso originario de la vida. Los constantes avances en la investigación genética y las biotecnologías ponen a nuestro alcance unas posibilidades terapéuticas que hacen posible curar y prevenir muchas enfermedades hasta ahora incurables. Mejorar, sanar y humanizar la vida es la tarea más noble de los científicos. Aunque todo lo que se puede hacer, no por eso debe hacerse -porque la ética debe acompañar la investigación científica- no comprendemos la postura de principio que tiene la Iglesia de oposición y de condena a las investigaciones científicas y a la posibilidad de poner la ciencia al servicio de los seres humanos.

En el umbral de una época rellena de esperanza en el campo de la vida necesitamos la búsqueda común e intercultural de una bioética que acredite y fomente la responsabilidad humana. La verdad no se posee, se búsca, y es la suma de muchas verdades. Y siempre llegan nuevas certezas. Cuando una verdad excluye las otras, deja de ser verdad porque la duda es parte de la verdad.

En definitiva, la diferencia fundamental entre el modelo social que defiende el Vaticano y los que podemos plantear las entidades que apoyamos esta declaración es que nosotros respetamos la diversidad ideológica y su traducción en leyes y normas de convivencia que siempre buscan dar libertad y responsabilidad para que sean las personas las que puedan decidir; por contra, el discurso oficial de la Iglesia católica y muchas religiones tratan de imponer su propuesta ideológica particular, mediante leyes y normas de convivencia, al conjunto de la ciudadanía, tanto si comparten su moral como si no. Queremos denunciar el talante excluyente y exclusivo que caracteriza el discurso religioso.

 

Por estas razones invitamos a la sociedad, a la ciudadanía, a expresar su posición crítica, de manera activa y libre. Por responsabilidad, por dignidad.

El conocimiento despeja la superstición

por Julián

 

Hace unos días, releyendo un perdido libro electrónico en circunstancias nada consecuentes con la temática de la lectura me ocupó la siguiente reflexión. En dios se cree por necesidad o comodidad pero sobre todo por inducción. Para garantizar el control de la gentes las religiones se apoyaron en la superstición y en la fe en lo extra natural y en dios. Donatien Alphonse François de Sade en 1782 escribió:

...

El Sacerdote : ¿Quién puede comprender los designios inmensos e infinitos de Dios con respecto al hombre, y quién puede comprender todo lo que vemos?

El Moribundo : Aquel que simplifica las cosas, amigo mío, sobre todo aquel que no multiplica las causas para mejor enredar los efectos. ¿Para qué necesitas una segunda dificultad cuando no puedes explicar la primera, y desde el momento en que es posible que la naturaleza, haya hecho por sí sola lo que le atribuyes a tu dios, por qué quieres buscarle un amo? La causa de que no comprendas es quizá lo más simple del mundo. Perfecciona tu física y comprenderás mejor la naturaleza, depura tu razón y entonces no tendrás necesidad de tu dios.
...

de "Dialogo entre un Sacerdote y un Moribundo"

La religión siempre ha sido enemiga natural del conocimiento ya que persigue objetivos antagónicos (sojuzgar con el dogma versus liberar con la razón). Las iglesias intentan intervenir en la formación de las personas actuando también allí donde reciben el conocimiento, en la propia escuela. Reflexiona sobre los mensajes cruzados e incongruentes con la ciencia y la sociedad que se pueden lanzar desde la oficial asignatura de religión.

Deciamos ayer ...



Somos un grupo de personas, mayoritariamente padres y madres de alumnos de escuelas públicas, que hemos decidido organizarnos para demandar un modelo laico y aconfesional de enseñanza pública y crear un colectivo que sirva de apoyo y referencia para los padres y niños que no estudian religión en la Escuela Pública.
El Colectivo tiene un carácter independiente de cualquier organización, asociación, sindicato, confesión religiosa o grupo político, y se sostiene económicamente con las aportaciones de sus socios.

LO QUE DENUNCIAMOS DE LA ACTUAL SITUACIÓN

1. No aceptamos tener que declarar públicamente datos sobre la opción religiosa de la familia cuando accedemos a un centro educativo público, dónde se nos pregunta si optamos por religión o no.
Nos ampara nuestra Constitución, cuando en el punto 2 del Artículo 16 dice: "Nadie podrá ser obligado a declarar sobre su ideología, religión o creencias".

2. No aceptamos la actual segregación de los alumnos en función de las creencias de sus padres. Este apartheid se produce desde los 3 años de edad, durante una hora lectiva o dos a la semana (según centros) en la etapa de Educación Infantil (3-5 años), y dos veces a la semana, durante una hora cada vez, en Primaria (6-12 años) y en Secundaria (12 - 16 años).
La separación de los niños desde una edad tan temprana hace que, antes de que tengan uso de razón, los de la opción minoritaria (casi siempre los que no cursan religión) se sientan los "raros", al igual que sus familias en el pueblo o barrio.
La presión motivada por la segregación es tan fuerte que nos encontramos con muchos padres que no están dispuestos a soportarla y envían a sus hijos a la opción de religión a pesar de no ser religiosos.

3. No aceptamos la desigualdad en el currículum escolar, en el que figura si un alumno ha cursado religión o no. Aunque la nota no cuente para pedir becas o en la media de selectividad, este dato marca ideológicamente y puede provocar desigualdades de trato a la hora de acceder a otros centros de formación, a universidades privadas o a un puesto de trabajo.

4. No queremos que nuestros hijos vivan una situación de aparcamiento durante 2 horas a la semana, en las que, según una sentencia del Tribunal Supremo, no pueden recibir conocimientos que afecten al resto de las materias lectivas para evitar que tengan ventajas sobre los niños que cursan religión; lo cual, en la práctica, está significando que no hacen nada, porque todo está relacionado, de una u otra manera, con alguna materia. En la mayoría de las clases que conocemos, los niños pierden esas horas que sus compañeros dedican a la formación religiosa.
Y, mientras tanto, la escuela pública no está ofreciendo a nuestros hijos una formación integral, descuidando la formación en valores humanistas y cívicos, tan necesarios para afrontar una sociedad tan compleja y tan cambiante como la que les va a tocar vivir.

5. No queremos que nuestros hijos reciban presiones ideológicas de ningún tipo en las escuelas públicas de un estado democrático y aconfesional. Y estamos soportando presiones de todo tipo:
Presiones ambientales con la preparación de fiestas religiosas en los colegios.
Presiones de algunos profesores de los centros que, por diversos motivos, intentan conseguir que todos los niños asistan a la clase de religión.
Presiones de los profesores de religión que, pese a estar propuestos arbitrariamente por la jerarquía eclesiástica, cada vez se les permite un mayor protagonismo en la vida de los centros (se les delega la preparación del día de la paz, de la solidaridad... etc., como si sólo desde esa opción ideológica se pudiese ser pacifista o solidario...) y realizar funciones para las que no han sido contratados.
Las presiones pueden ser de lo más discretas y sutiles, pero están siendo muy eficaces porque el número de personas que se declaran no religiosas no para de aumentar en nuestro país y, sin embargo, los niños que no van a religión en las escuelas públicas son cada vez menos.

QUÉ QUEREMOS CONSEGUIR:

1. Queremos una escuela sin dogmas y sin verdades únicas y excluyentes. Las creencias pertenecen al ámbito de lo privado y es en él donde las familias, en colaboración con las iglesias, tienen que asegurar la formación religiosa de sus hijos. Para conseguirlo, la enseñanza de la religión tiene que desaparecer el sistema educativo público.

2. Queremos una escuela que forme a sus alumnos en valores humanistas universales, en la pluralidad, en el respeto a los derechos humanos y en los valores constitucionales y democráticos.
Consideramos necesaria la impartición de una educación en valores efectiva para las etapas de Primaria y Secundaria, obligatoria para todos los alumnos e impartida por los profesores de la red pública de enseñanza.
Sólo así conseguiremos una escuela pluralista que fomente un ambiente de respeto hacia todos, en un momento en el que nuestra sociedad avanza hacia un modelo multicultural.



COLECTIVO ESCUELA LAICA

 

 

y con esto, hace tres años, un grupo de padres pretendíamos defendernos de la agresión moral e intelectual que supone la asignatura de religión en la educación de los niños y adolescentes.